Wednesday, May 11, 2005

...el sabía que no era su hombre, ella sabia que no era su mujer.
Aun asi, se entregaron el uno al otro, dejando en manos de la vida la responsabilidad de separarlos cuando llegase el momento.
Esto en vez de disminuir la entrega, hizo que los dos viviesen cada instante como si fuese el ultimo y el amor entre ellos pasó a tener la intensidad de las cosas que se tornan eternas porque saben que van a morir...